
Hace semanas que comenzó la campaña electoral libanesa. Este es el cartel electoral que ha empleado el general Michel Aoun, líder cristiano aliado con Hizbulá, para pedir el voto femenino: sobre un fondo naranja -color del partido, como es el rojo al socialismo o el azul a la derecha española-, un bello rostro de mujer se vuelve hacia la potencial votante. A su lado, una consigna: "Sois belle et vote" (sé guapa y vota).
Gracias a Alá, a Dios o al espíritu de Marx, la sociedad libanesa ha reaccionado. Y el machismo despectivo y de burla hacia la mujer no ha dejado indiferente a nadie.
Qué ignorante y torpe el que no valora ni respeta a la mujer. Su desconocimiento le priva de la mayor generosidad y entrega.
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