¿Nos tomamos una caña?
Pues que sea con un choricito o una morcilla, ensaladilla, tartar de ternera al vodka o una tablita de quesos.
Un lugar con un incomparable sabor castizo donde se ha conservado la barra y el suelo del antiguo local y actualizado con pocos elementos que armonizan la estancia.
C/ Libertad, 1.